Opinión Taurina…

http://www.balun-canan.com/
¡TRIUNFOS DE MENTIRA Y OROPEL!
MEXICALI, B. C. (SBC).-En la penúltima corrida de toros en la plaza de toros “La Luz” de la famosa feria de León, Guanajuato, el sábado dos del presente mes Espectáculos Taurinos de México, empresa propietaria de dicha plaza y quien promueve dicha feria, montó un cartelazo con los jóvenes matadores de toros Octavio García “El Payo”, Arturo Saldivar, Juan Pablo Sánchez y Diego Silveti, quienes lidiaron un encierro de la ganadería de Fernando de la Mora.

El resultado artístico de dicho evento, fue “Apoteósico” pues,  los alternantes cortaron orejas y rabos y, hasta dos toros indultados por Arturo Saldivar y Diego Silveti, a excepción del “Payo”, que no tuvo suerte con sus toros y como es obvio, salieron a hombros de los aficionados de la plaza, Saldivar, Juan Pablo y Diego ante el regocijo y delirio de los asistentes y también dicho triunfo se lo llevo el ganadero por ese encierro que lidió el cual resultó de “bandera”.

Reza un refrán que las “malas mañas”, se aprenden bien y pronto y eso es lo que dejaron de manifiesto tanto esos bisoños toreros, que a temprana edad ya aprendieron latín, latón y lámina acanalada, en eso de hacer trampas al público y aficionados, escogiendo reses de poca monta al igual qué sus administraciones, empresa y ganadero ya que fue un encierro “anovillado”, ausente de trapío y con unos “cuernitos”, que se parecían a los de la tía rosa de Bimbo,  siendo la mayoría de ellos capachos; que lidiaron  los toreros haciendo de las suyas, y con toda clase de suertes, con aquella partida de animales que por su aparente poca edad, y hay que reconocerlo, con mucha clase permitían florituras taurómacas de sus lidiadores ante el ¡paroxismo!, de aquellas masas feriantes que coreaban el desarrollo de ésas épicas farsas taurinas. Tristemente esos triunfos fueron alcanzados ante reses de paupérrima presencia y no ante toros hechos y derechos con cuatro y hasta cinco años, muy ofensivos de cornamenta  y con peligro como los que tanto Arturo Saldivar, Juan Pablo Sánchez y Diego Silveti,  suelen lidiar en sus campañas españolas y francesas cada temporada, porqué allá sí que tragan  toros con ésa catadura y aquí, hacen lo mismo que los toreros importados lidiar toros chicos y sin peligro, al fin y al cabo, en México, “todo sé vale”. 

Triunfos como esos, son de mentira y oropel que lamentablemente, son exaltados por los corifeos  al servicio de esos toreros y hasta por ellos mismos, para darle realce a su palmarés profesional llegando inclusive dichos diestros, a convencerse de que ese tipo de “hazañas”, son ¡honestas! En lo personal quien esto escribe, siente frustración por la expectativa de profesionalismo y honradez qué tuve, por esos tan buenos y jóvenes toreros mexicanos, que inclusive lo he comentado en varias ocasiones; para mí, son los mejores toreros nacionales en la actualidad. En cuánto al ganadero don Fernando de la Mora, supongo que está de plácemes y orgulloso; por qué vergüenza para nada, por aquel encierro manso, sin trapío ni peligro, que resultó a la medida para los  jóvenes diestros aún,  pero avezados en las “malas mañas”.

Aniversario sesenta y siete de la plaza México.- Fue nocturno y con una entrada que mostró vacíos en los tendidos numerados y las localidades generales prácticamente desiertas es decir, la entrada fue mala para fecha tan significativa, con un cartel que para ser de aniversario, le faltó remate pues, únicamente fueron tres alternantes El Zotoluco, Morante de la Puebla y El Payo; y para que rimara con el cartel, pues también fueron tres toros de San Isidro y tres de Barralva.

El Zotoluco.-  como primer espada le correspondió en suerte el mejor toro de la noche, de San Isidro, que fue a la postre el mejor de los que saltaron a la arena mostrando con él su magisterio taurino de gran figura del toreo de nuestro país, hacía mucho tiempo, que no le veía torear como lo hizo con aquel toro, desplegando toda su maestría en cada uno de los muletazos cuidando del toro dándole su tiempo y distancia en cada serie, todas ellas rematadas soberbiamente con adornos de buen gusto y pases de pecho; tiró a matar dejando un espadazo hondo, que no hizo efectos inmediatos y tuvo que recurrir al descabello fallando y ahí, perdió lo que pudo ser premiado con apéndices. Con su segundo de Barralva, nada pudo hacer.

Morante de La Puebla.- Sólo detalles en su primero de San Isidro, indigno animal para ésa plaza y la fecha que sé trató, en su segundo toro de la ganadería de Barralva, le cuajó unas verónicas de las que el sevillano sabe instrumentar rematadas con dos medias de antología y la plaza estalló en olés con la muleta, volvió a tejer una faena a base de porfiar y estar en la cara del toro, para tirar de él y ligar muletazos de gran factura,  rematados con adornos impecables puede decirse que tenía ganada una oreja pero falló con la tizona y hasta un aviso recibió del biombo y se retiró entre abucheos.

Octavio García El Payo.- Con su primer enemigo que fue de San Isidro, malo, manso y sin trapío poco pudo hacer el rubio torero queretano a pesar de su gran entrega y esfuerzo: Tuvo que salir el sexto toro que cerraba el festejo de Barralva, y que a esas alturas del mismo y de la noche, los aficionados no querían irse del “embudo de insurgentes, sin antes no ver triunfar a uno de aquellos alternantes y a punto estuvieron de ver recompensado su deseo pues, El Payo logró elaborar una faena a base de jugarse el físico alegremente ante un toro cornipaso, fuertemente armado que desarrolló sentido y el diestro de blonda cabellera, ahí en la cara del toro extrayéndole muletazos uno tras otro, hasta ligar series bien rematadas y el público entregado por aquel magisterio de hombría y bien torear, se tiró a matar el torero y  para su desgracia, pinchó varias veces y toda aquella faena de entrega, se acabó, perdiendo así un gran triunfo.
*Ex Juez de plaza Calafia y comentarista de Grupo Radiorama. Febrero 08/2013.  opiniontaurina@gmail.com