domingo, 11 de diciembre de 2011

Castigo a Chuy González exige la “Vieja Guardia” del PAN



* En 1989, el PAN con el triunfo de Ernesto Ruffo logró romper la hegemonía y autoritarismo del sistema político que gobernó a nuestro país por más de 70 años; Baja California marcaba un hito en el escenario político nacional.
TIJUANA, B.C.(SBC).-
El ¨Salón Azul¨ de la calle segunda e I, fue el escenario este día, donde diez dirigentes de la -Vieja Guardia- panista, presentaron pruebas de los malos manejos durante la administración del ex alcalde Jesús González Reyes, a quien acusan además de corromper las prácticas democráticas de su partido, y ser el principal responsable del deterioro político del Partido Acción Nacional del cual se ha aprovechado para su beneficio personal, junto con una camarilla de sus incondicionales. Luego de los graves señalamientos directos contra Chuy González y otros nueve militantes entre los que se encuentra el actual presidente del comité municipal del PAN, Enrique ¨Kike¨ Méndez Juárez, los representantes de la -Vieja Guardia- lo hacen responsables de lo que les suceda a su vida, familiares o amigos.

El llamado Grupo de Análisis y Acción Política lic. Carlos Castillo Peraza -la Vieja Guardia-, está conformado por Pedro Moreno Lomelí, Armando Pérez Castañeda, Amado García Ortíz, Héctor Castellanos Muñóz, José León Ramos, José Valenzuela Martínez, Rogelio Zepeda Villaseñor, Hugo Martín Solorio, Manuel Robledo Grajales y José Rodríguez Coronado.

En un amplio comunicado a la militancia panista y a la opinión pública, el grupo de los 10 de la -Vieja Guardia-, que originalmente es de 15, pero 5 no asistieron, exponen en seis cuartillas los motivos que los obligaron a denunciar al ex alcalde Chuy González, cuando la legislatura turnó el resultado de la auditoría en que se demuestran malos manejos y desvío de muchos millones de pesos sin que en su momento haya actuado la Procuraduría que estaba a cargo de Antonio Martínez Luna durante el gobierno de Eugenio Elorduy

A la vez, los integrantes de la -Vieja Guardia- del PAN aceptan errores y desviaciones en el ejercicio del poder cometido por los gobiernos panistas, así como la compra venta de votos al interior de este partido para comerciar con las postulaciones a las candidaturas, por 5 mil y hasta 20 mil pesos

¨A mí, dijo el arquitecto Castellanos, Chuy González me ofreció mucho más, que luego les voy a decir¨, manifestó don Héctor durante la ronda de preguntas y respuestas después de dar lectura al comunicado y entregar los resultados de la auditoría practicada en su tiempo al ex alcalde donde se demuestra la desviación de millonarias cantidades, el encubrimiento al peculado, y al ¨factura-gate¨ cuando regidores y funcionarios de su administración presentaron facturas falsas de gastos inexistentes en complicidad con el ex oficial mayor, Mario Martínez.

Dice el comunicado.-

Un grupo de miembros activos y adherentes del Partido Acción Nacional (PAN), nos hemos reunido para realizar el trabajo político que se requiere para retomar la senda que abandonamos por descuido, negligencia y causas gravemente cuestionables que nos han alejado de nuestros objetivos tanto temporales como trascendentes, La tarea tiene como finalidad el advenimiento de una patria ordenada y generosa y una vida mejor y más digna para todos los mexicanos. Son estas razones las que nos impulsan a suscribir la siguiente:

EXPOSICION DE MOTIVOS

Como una realidad incontrovertible en el escenario político nacional, una abrumadora cantidad de ciudadanos coinciden en opinar sobre el grado preocupante del deterioro de nuestro proceso democrático, con especial énfasis en la descomposición de los partidos políticos. De este fenómeno de ocupan intelectuales, politólogos, analistas, medios de comunicación, académicos y grupos e instituciones sociales, que manifiestan su preocupación por los magros avances y en algunos casos retroceso que ha sufrido el país en esta etapa de su desarrollo.

Resueltos los problemas de la alternancia, era dable pensar en una transición gradual pero firme, de un país regido de manera autoritaria, hacia una democracia participativa; de un pueblo mayormente abrumado por la pobreza y la ignorancia, hacia ciudadanos mejor informados y con acceso a mejores condiciones de vida; del predominio de la corrupción, impunidad e inseguridad, a un estado de derecho que estimula a la sana convivencia y al desarrollo personal y comunitario.

Sin desestimar los logros que indudablemente se han obtenido, las transformaciones han sido más de forma que de fondo y sus alcances no han dejado satisfechos a la gran masa de electores, como lo demuestran los resultados de los procesos de los últimos años que pueden interpretarse como un referéndum a la actuación de las instituciones políticas y a los gobernantes emanados de ellas.

El abstencionismo ha ido creciendo exponencialmente, dejando al ¨voto duro¨ la tarea de elegir, por sobre la mayoría de la población.

El Partido Acción Nacional no ha permanecido ajeno a ese proceso. Ha sufrido las consecuencias del acceso al poder, por el desgaste natural de los cambios; no ha estado plenamente identificado con las metas de sus gobiernos porque las desconoce en lo general y solamente es convocado ¨a posteriori¨ para la defensa a ultranza de las consecuencias de sus acciones, al grado de enfrentarse con graves contradicciones. Ha desestimado sus principios de doctrina, propiciando el ingreso de individuos de dudosa reputación y pésimos antecedentes, bajo el argumento de popularidades que garantizan el triunfo electoral a partir de una masiva exposición mediática o bajo la inversión de millones de pesos.

El partido no ha encontrado la fórmula para procesar un crecimiento desmesurado de su membrecía y adherentes, que le permitan evitar los cacicazgos de quienes compran el voto interno y externo para evitarse el difícil trabajo de convencer y argumentar, renunciando a la noble tarea de la crítica

constructiva de las administraciones y funcionarios emanados de su seno, que se apartan o transgreden abiertamente sus principios de doctrina y supeditan su actuación a los deseos del ¨jefe político¨ en turno.

En resumen, nuestro instituto político padece ahora los mismos defectos y vicios que el partido a quien democráticamente despojamos del poder; el pragmatismo del poder por el poder, la satisfacción de las ambiciones personales y el enriquecimiento ilícito, sean puestos por encima de los valores que nos dieron vida y forma.

En este contexto, quienes compartimos la preocupación por recomponer la institución y recuperar los valores tradicionales y vocación democrática que le dieron origen, militantes y adherentes, hemos decidido constituirnos en un grupo de análisis y discusión, de formación desarrollo y comunicación que propicie al interior del partido la estructuración de miembros activos y adherentes mejor informados y capacitados para la toma de decisiones con motivaciones profundas y de más largo plazo que proponga y encabece acciones de transformación interna para un sano y armónico desarrollo; que privilegie la calidad de sus elementos por la cantidad de ellos; que revitalice el debate de las ideas y que herede a las futuras generaciones una patria más ordenada y generosa.

En otra hoja del comunicado, los integrantes de la –Vieja Guardia- dicen que buscarán el rescate de su partido siendo voceros de los logros pero criticarán sin reticencias los yerros de dirigentes y funcionarios, y concluyen su comunicado con la última parte donde describen.

HECHOS


En 1989, el PAN con el triunfo de Ernesto Ruffo logró romper la hegemonía y autoritarismo del sistema político que gobernó a nuestro país por más de 70 años; Baja California marcaba un hito en el escenario político nacional.

Durante más de 4 décadas, la membrecía del partido estuvo constituida por poco más de 100 miembros acreditados con credencial de afiliación. A partir del primer domingo de julio de 1989, el ingreso de miles de ciudadanos al partido sin ningún control, provocó un cambio en su estructura organizacional y operativa sin ninguna planeación. Paulatinamente el partido se fue desviando de sus objetivos hasta llegar a la situación actual.

Nuestro grupo se ha avocado a la tarea de cambiar la grave situación que vive el partido actualmente y que ha deteriorado la imagen y prestigio alcanzado años atrás.

A pesar de los señalamientos hechos en tiempo y forma, las instancias jurídicas no funcionan; la impunidad es la respuesta y común denominador que impide hacer brillar la justicia en nuestro estado. Por otro lado las instancias estatutarias y reglamentarias de nuestro partido no operan, simplemente no hay interés, se evaden y se solapan las respuestas. Solo la vía ético-política será el instrumento que utilizaremos en un esfuerzo por cambiar la crisis interna de nuestro instituto político y señalar a los culpables con nombre y apellido. Esperando contar con el apoyo de los verdaderos panistas y la ciudadanía tijuanense. ¨Es un imperativo

crear los nuevos liderazgos que México necesita para guiar a nuestros compatriotas hacia el advenimiento de una patria ordenada y generosa y una vida mejor y más digna para todos los mexicanos¨.

Los cinco integrantes de la –Vieja Guardia- que no asistieron a la conferencia este domingo, fueron Esperanza Hernández, Nicolás Reyes García, Ignacio López Tamayo Herlinda Gómez González y Jorge Fuentes Fuentes.

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