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* Ya no hay motivos de orgullo mexicano con quienes están vendiendo nuestra patria.
TIJUANA, B. C. (SBC).- Se terminó el festejo en el que se conmemoró el natalicio del indio de San Pablo Guelatao, quien llegó a ser Presidente de México en una época muy difícil de la historia de nuestro país, ¿y qué tenemos después de 211 años de ese feliz acontecimiento del nacimiento de una figura tan ilustre en México?
¿Qué tenemos después de casi 145 años de su muerte (ya que murió el 18 de julio de 1872)?
Lo que tenemos es que nuestros gobernantes han deshonrado la memoria de quienes le dieron un rumbo firme y claro a nuestro país, y no solamente tienen este "barco" a pique, zozobrando, hundiéndose, sino que encima de todo, nada les importa, mientras saquean nuestras riquezas y se llevan sus "comisiones".
Hace 24 años un Presidente "innombrable" promovió y logró reformas al Artículo 130 de nuestra Carta Magna, para desaparecer el legado juarista de la separación Iglesia-Estado, so pretexto de darles derechos políticos a los ministros de culto religioso.
Antes de eso, en 1992, Carlos Salinas de Gortari logró que el Congreso de la Unión aprobara reformas al Artículo 27 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, despareciendo el legado de Emiliano Zapata, de la Tierra y Libertad, y han ido facilitando la reducción del campo mexicano para convertirlo en extensiones de parques industriales y comerciales.
Un ejemplo de eso último lo tenemos reciente, y en nuestro propio estado, con la empresa Constellation Brands, que es la punta de lanza de la desaparición de hectáreas cultivables y la explotación de millones y millones de litros de agua que supuestamente los agricultores del Valle de Mexicali no pueden pagar, y ese es uno de muchos pretextos para acabar con los legados revolucionarios, así como vimos también la aniquilación de los ideales de Benito Juárez.
Asimismo, hace unos días, el pasado sábado 18 de marzo, ya no se conmemoró el Día de la Expropiación Petrolera, porque el actual Presidente Enrique Peña Nieto se encargó de aniquilar el legado del gran "Tata" Lázaro Cárdenas, quien precisamente había rescatado para los mexicanos el petróleo y la industria petroquímica que estaban en manos de capitalistas extranjeros, y ahora, con la Reforma Energética, aprobada en el 2013, los extranjeros vuelven a apropiarse de nuestros recursos y de nuestras industrias.
¿Qué tenemos ahora qué festejar o conmemorar de los legados de nuestros patriotas mexicanos que le habían dado certeza al futuro de nuestro México, pero que gobernantes corruptos han desvanecido de nuestras esperanzas?
Ya no hay motivos de orgullo mexicano con quienes están vendiendo nuestra patria.
Han muerto los legados de Juárez, Zapata y Cárdenas.
En este día 21 de marzo que está terminando, entonces honramos a nuestro Benemérito de las Américas, quienes queremos y luchamos por rescatar a México para los mexicanos, porque los hipócritas que nos gobiernan dicen honrar la memoria de Benito Juárez, pero por dentro solamente están celebrando el inicio de la primavera, porque el legado juarista lo han deshonrado.
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